Pensar en la fiesta de Halloween en la actualidad nos lleva pensar en la mayoría de las personas que es una festividad inofensiva que permite  a los pequeños tener un momento de diversión y amenidad, no siendo mas allá de un juego donde se usan disfraces y se visitan casas para colectar dulces.

De donde vino la tradición de utilizar vestimentas y disfraces con esta temática sobresaliente como la fiesta de Halloween. ¿Cuál es el origen verdadero de estos disfraces o a que se está representando?

Estos pueblos paganos "Los Celtas" temían a los malos espíritus que venían hacia la tierra en este día de los muertos, así que mediante sus sacerdotes Druidas desarrollaron practicas ocultas para mantener a línea, es decir alejados y no ser atacados de diferentes formas en las que los espíritus malignos puede hacer daño a las personas.

Hoy en día el disfrazarse para  esta celebración se piensa que los disfraces debe ser algo relacionado con el mundo de lo oculto, un mundo espiritual  y el mundo de la muerte, y es por esta razón que vemos toda clase de disfraces desde personas acuchilladas, traspasadas por hachas que representan que están a un paso de la muerte, personas sangrando, etc, además de vampiros, brujas, hechiceros, fantasmas, magos, asesinos, duendes y hasta disfraces del mismo diablo en persona vestido en color rojo y con un trinche en la mano, con cuernos en la cabeza.

Desde el momento en que aceptamos celebrar esta fiesta de Halloween, estamos aceptando indirectamente todas las implicaciones de los disfraces que se usan, sus costumbres y compartimos el mismo objetivo que es exaltar, enaltecer el mundo de lo oculto, el mundo espiritual y el mundo de la muerte.

Estos espíritus malos SON REALES y aunque para muchos esto parece una especie de juego sin mas repercusiones, lo que permite es en realidad atraer a millones de espíritus malignos a nuestro hogar, a nuestra vida, pues cuando una persona participa en estas fiestas de Halloween, le abre la puerta de su mente, de su hogar y de su corazón, a demonios que están listos para entrar a tomar posesión de aquello que le hemos entregado, estemos seguros que estos espíritus malignos traerán consigo destrucción en la vida de cada cual, pues aunque Dios protege y nos cuida, no lo hará si somos nosotros mismos los que aceptamos estas cosas en nuestra vida. Es mejor no abrir puertas que no conocemos, es mejor no apoyar, no participar y rechazar de raiz esta fiesta.

Sepamos que Dios es un Dios celoso de su pueblo y de sus hijos, pues toda la alabanza solamente debe ser para Dios, cuando le oramos y pedimos le exaltamos, le honramos por darle toda nuestra confianza solamente a El, sabemos que nadie más merece toda la alabanza, ni bestia, ni ángel, ni principado, ni potestad y menos merece ser exaltado el enemigo de Dios, satanás.

¿Qué puedes pensar si tus propios hijos se ponen en alianza con tu enemigo, y se unen con él para volverse en tu contra y en contra de sus propios hermanos?. Es así exactamente como ve Dios a todos aquellos que participan en estas celebraciones y fiestas de Halloween, pues esos días son días de gran ofensa hacia nuestro Creador. Estemos seguros que a Dios NO le agrada para nada que sus hijos participen de Halloween, pues de esta forma le están entregando su voluntad al mismísimo enemigo, exaltando al enemigo de las almas de los hombres, exaltando a la muerte y al mundo de lo oculto, exaltando a satanás.

HACER ESTO ES DIRECTAMENTE IR EN CONTRA DE LA VOLUNTAD DE DIOS, PUES EL NO QUIERE QUE ESTEMOS EN EL BANDO DEL ENEMIGO.

En este punto muchos pueden decir, ¿Pfffff, Que exageración decir que traicionamos a Dios?. Pero piense bien, usted no puede estar con Dios y con el diablo, a medias con Dios y a medias con el diablo. Nadie puede amar a dos señores, pues menospreciara a uno y amara al otro (Mateo 6:24), o querrá mucho a uno y despreciara al otro.

No se puede servir a Dios y al Diablo y tener amor para los dos, pues el amor es como el agua que sale de una fuente que nace del corazón, no se puede tener dos tipos diferentes de aguas de la misma fuente, solo sale un tipo de agua y ese es el que realmente amamos en realidad.

Por esta razón cuando nos unimos aun en forma muy ligera, apoyando levemente esta fiesta de Halloween, pero participamos de ella y la consentimos, es decir volcamos nuestra voluntad para ser UNO con el reino de las tinieblas, hemos traicionado a Dios y hemos despreciado a la salvación que Dios a ofrecido para todos los seres humanos, despreciamos a Jesucristo.

Igual que lo hizo uno de sus apóstoles, Judas, quien vendió y traiciono a Jesús por el amor al dinero, recibiendo unas monedas, aunque Judas vió después la magnitud de aquello que había hecho, la traición ya estaba hecha.

La estrategia del enemigo es que en estas fechas participen la mayor cantidad de persona en todas las regiones, niños, mujeres y hombres de todas las edades son aptos para celebrar esta fiesta de Halloween.

Si sabemos que esta fiesta es para honrar al reino de Satanás y sus ángeles, podemos preguntarnos, ¿Que tiene que ver Dios con el diablo? Y nosotros a quien debemos elegir: ¿A Dios o al diablo? El apóstol Pablo dijo en una de sus cartas a la Iglesia de Corinto, que fue una de las primeras Iglesias de Jesucristo: Que no hay comunión entre la luz y la oscuridad, comunión significa unión de dos cosas que comparten cosas en común, no hay nada en común en Jesucristo y el diablo, menos pueden unirse para algún propósito, pues sus caminos son totalmente diferentes, mientras que Jesús quiere que todos procedamos al arrepentimiento para salvación del espíritu en el Reino de Dios, el diablo quiere que todos procedamos al pecado, idolatría y traición a Dios para perdición del espíritu en el infierno.

La palabra de Dios dice que solamente uno es el camino al Padre:

Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.

No tardes, no te confundas, no dudes, toma una buena decisión y di NO AL HALLOWEEN. Decir si a Dios y a Jesucristo por siempre y toda la vida. Amen.

Nunca es tarde para volver a Dios y reconocer que hemos participado en cosas que no agradan a Dios, si tu eres de las personas que han participado en estas prácticas de las fiestas de halloween y no solo en esto sino en otras obras, como la brujería, hechicería, consultar con adivinos, brujos, confiar en los horóscopos (ya que son una estafa) u otros pecados que ofenden a Dios gravemente, reconoce hoy en tu corazón que has ofendido el amor tan puro que Dios te ha dado desde el momento que naciste en la tierra y puedes repetir la siguiente oración de perdón a Dios:

Dios mío, Señor mío Jesucristo, sé que he participado en obras malas y me he unido a tu enemigo para recorrer caminos que no te agradan, hoy te pido que me perdones, me arrepiento y te pido que me limpies de toda impureza y pecado que he cometido contra ti, déjame recibir hoy a Jesucristo en mi corazón y dame una segunda oportunidad para vivir como tu quieres que viva, protégeme, ampárame aun de mis propias decisiones, que muchas veces sin conocer, me hago participe de las obras de satanás, líbrame de todo mal y entra en mi corazón para dar los frutos que tu quieres que de. No me permitas alejarme nunca más de tus caminos y que tu amor y misericordia este conmigo todos los días de mi vida. Padre te pido esto en el nombre de Jesús. Amén.